El Puerto necesita 15 socorristas para mantener las Banderas Azules

Obligado a garantizar socorristas si quiere mantener las Banderas Azules en 2025

La Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (ADEAC), entidad responsable del programa Bandera Azul en España, ha trasladado al Ayuntamiento de El Puerto de Santa María que la concesión de estos distintivos para la temporada de baño de 2025 está supeditada a un compromiso formal del alcalde que garantice la prestación del servicio de salvamento en las playas del municipio, según documentación a la que ha tenido acceso este medio.

Según el escrito remitido al Consistorio, el Jurado Nacional del programa Bandera Azul —reunido los días 12, 13 y 14 de febrero— ha evaluado las candidaturas presentadas por El Puerto y ha establecido como condición imprescindible que se acredite la dotación del personal de socorrismo comprometido en dichas solicitudes. Este compromiso incluye no solo el número de profesionales, sino también la cobertura horaria y la duración del servicio durante la temporada estival.

La dotación mínima exigida por ADEAC para cada playa es la siguiente:

Fuentebravía: 2 guardavidas acuáticos

Santa Catalina: 5 guardavidas acuáticos

La Puntilla: 2 guardavidas acuáticos

Valdelagrana: 6 guardavidas acuáticos

Este compromiso debe formalizarse mediante un escrito firmado por el alcalde y remitido por vía telemática antes del jueves 20 de febrero de 2025. La entidad advierte expresamente de que, si durante las inspecciones de la próxima temporada se detecta que dicho compromiso no se ha cumplido, se procederá a la retirada definitiva de la Bandera Azul en las playas afectadas.

En pos de evitar la situación del año pasado, ADEAC subraya que la decisión adoptada tiene carácter provisional, a la espera de la documentación requerida y de su validación por parte del Jurado Internacional, cuya reunión está prevista para el mes de abril.

Cabe recordar que, en la pasada temporada, el Ayuntamiento no llegó a izar las Banderas Azules, al considerar que no se cumplían los estándares mínimos del programa. El servicio de socorrismo no contaba con un contrato en vigor y fue atendido mediante contratos menores que no cubrían los criterios exigidos, llegando a haber solo un socorrista por playa durante parte del mes de julio.

La situación actual pone de nuevo en evidencia la necesidad de una planificación adecuada y de un contrato de salvamento y socorrismo que se ajuste a los requisitos de calidad y seguridad que exige el programa Bandera Azul.