

El Ayuntamiento de El Puerto de Santa María ha procedido al derrumbe y acondicionamiento de un solar en el que había una construcción en ruinas situada en la Avenida de Sanlúcar, una actuación llevada a cabo de forma subsidiaria ante la reiterada falta de respuesta de la propiedad y el grave riesgo que el inmueble suponía para la seguridad ciudadana y la salubridad pública.


La intervención municipal tiene su origen en una denuncia por el mal estado de la finca, que presentaba una abundante acumulación de maleza, convirtiéndose en un foco potencial de incendios y en refugio para la proliferación de roedores y otros animales, con el consiguiente riesgo para el entorno. Ante esta situación, el Ayuntamiento emitió varias órdenes de ejecución instando a la propiedad a realizar labores de desbroce, limpieza, demolición de las edificaciones existentes, desescombro y desratización del solar.

Sobre la finca constan dos órdenes de ejecución y hasta cuatro sanciones económicas por incumplimiento. A pesar de estos requerimientos, la propiedad hizo caso omiso de las obligaciones impuestas, lo que agravó progresivamente el estado de abandono del inmueble. Tras registrarse un incendio en el pasado mes de noviembre y a petición de la Policía Nacional, el Ayuntamiento decidió actuar de manera inmediata para eliminar cualquier riesgo para vecinos y transeúntes.
El alcalde de El Puerto de Santa María, Germán Beardo, ha subrayado que “el Ayuntamiento no puede permitir situaciones de abandono prolongado que pongan en peligro a las personas y deterioren la imagen y la convivencia en nuestros barrios”, destacando que la actuación responde a la responsabilidad municipal de velar por la seguridad y el interés general. “Actuamos con firmeza cuando los propietarios no cumplen, para prevenir riesgos y mejorar la calidad de vida de nuestros vecinos”, ha añadido el primer edil.
Con esta intervención, El Puerto avanza para garantizar espacios más seguros, saludables y accesibles para todos sus vecinos, reafirmando el compromiso municipal de intervenir de manera progresiva y diligente en aquellos casos en los que el abandono de inmuebles suponga un peligro, apostando por la regeneración urbana y la creación de espacios más seguros y saludables.




























